2016: Menos propósitos y más objetivos
Un año más ha dado comienzo, y con ello una de las frases más utilizadas: “este año tengo el propósito de …” o “mi propósito de este año es …” Pero no hay que olvidar que un propósito no es más que el ánimo o la intención de hacer algo o de no hacerlo . Lo que significa que si ese propósito no se cumple no pasará nada y lo más probable es que lo dejemos para el año siguiente.
Pero, ¿y si en lugar de propósitos nos marcamos objetivos? ¿Por qué? Simple. Porque un objetivo ya no es una intención, es una meta y como tal ha de ser cumplida. Para ello los objetivos que nos marquemos deberán de ser lo más específicos posibles.
No juzgues cada día por lo que cosechas, sino por lo que plantas.-Robert Louis Stevenson
Un ejemplo muy sencillo y claro es el de la pérdida de peso: “quiero perder 4 kilos en 3 meses” Este objetivo, aunque delimita cantidad y el tiempo, no es lo suficientemente concreto ya que seguramente si los días de antes dejo de comer lograré el objetivo, pero no servirá de nada ya que volveré a recuperar el peso perdido en pocos días. Es lo que se conoce como hacerse trampas al solitario.
Si por el contrario hacemos una definición más detallada “perder 350 gramos aproximadamente a la semana hasta un total de 4kg y en un periodo de 3 meses”, la cosa cambia ya que ahora tendré que esforzarme cada semana en lograr el objetivo global a los tres meses.
Por este motivo siempre que definamos un objetivo (ya sea personal o profesional), éste ha de ser S.M.A.R.T.
S – Específicos
M – Medibles
A – Alcanzables
R – Relevantes
T – Limitados en el tiempo
Si lo aplicamos a la mejora del idioma:
S – Específico: Mejorar mi comprensión lectora en inglés mediante la lectura de artículos de prensa y blog.
M – Medibles: Ser capaz de leer y entender diferentes textos escritos en inglés, pudiendo hacer un breve resumen de los mismos.
A – Alcanzables: Adaptar la lectura al nivel de inglés que se posea.
R – Relevantes: El inglés es muy relevante en el panorama laboral actual
T – Limitados en el tiempo: Lectura de un artículo cada dos días durante un periodo de 6 meses.
Y por supuesto, no debemos olvidar revisar de forma periódica cada uno de ellos redefiniéndolos y adaptándolos a las circunstancias del momento. Un buen punto de control, para aquellos objetivos de larga duración, es el verano ya que aún nos quedarían unos meses hasta final de año.
Ahora toca pensar en esos objetivos, esas metas, que queremos cumplir este año ya sean personales como profesionales.
Si no puedes hacer grandes cosas, haz cosas pequeñas de una gran forma.-Napoleón Hill
Gracias por leerme, y espero que te haya ayudado y aportado.
Muchas Gracias!